Mantilla


Mantilla – Velo de oración

Qué es el velo de las mujeres en la liturgia?
El velo es símbolo de respeto por Dios y honor de la mujer.

Recuerda:
– la cortina del Lugar Santísimo donde solo quedaba el Señor: como en la persona que lo tiene;
– la nube luminosa que acompaña el vagabundeo del pueblo elegido por el desierto (Ex 13,20-22): el Señor guía;
– la nube del Espíritu Santo que cubrió con su sombra a la Virgen María (Lc 1,35);
– la nube brillante que apareció en la Transfiguración en el monte Tabor (Lc 9,28-36; 2P 1,17-18): ayuda a entrar en la contemplación.

Finalmente, es símbolo de bendición nupcial de las bodas (verbo latín nubere) entre el alma y Dios.

Expresa así la oración, la sencillez (desapego hacia el mundo), la humildad, la pureza, la libertad hacia las modas y desvergüenza del mundo.

 
Porqué usarlo?
Cubrirse la cabeza siempre se ha hecho en los templos, hasta los años 1970 cuando se ha interrumpido por razones puramente ideológicas, en el contexto que conocemos de la pérdida masiva de la Fe sobrenatural.

La mayor deficiencia en este mundo (con cada uno de nosotros)
es la falta de Fe (Mc 4,40 « Por qué tienen tanto miedo? Cómo no tienen Fe? »),
sin la cual no podemos salvarnos (Mc 16,16).

Concretamente, muchos no se encuentran con Dios personalmente, porque no se dan cuenta suficientemente de la centralidad y de la transcendencia de la Eucaristía (es « el centro y la cumbre de la vida cristiana », Vaticano II, LG 11).

Los seres humanos necesitan signos y mediaciones porque la Fe de la Iglesia es la de la Encarnación.

Por esto, entre otros elementos (como los reclinatorios, y la comunión recomendada en la boca),
y de forma absolutamente libre y opcional, para las que lo deseen,
con el fin de manifestar más (a una misma y en testimonio para los demás) la grandeza de la Eucaristía, presencia real del Hijo de Dios con todo su cuerpo, alma y divinidad, y el respeto y la Adoración.

Ayuda todas las otras personas a entrar en este espíritu de adoración.

 
Base bíblica y tradicional del uso de un velo:
1P 3,3 « Que su adorno no sea exterior, hecho de cabello trenzado, joyas de oro y vestidos ornados,
4 pero dentro de vuestro corazón en la incorruptibilidad de un espíritu apacible y tranquilo:
esto es lo que es precioso delante de Dios ».

1Co 11,5 « Toda mujer que ora o profetiza con la cabeza descubierta, afrenta su cabeza;
porque lo mismo es que si se hubiese rapado…
10 Por lo cual la mujer debe tener señal de autoridad sobre su cabeza, por causa de los ángeles [ángeles caídos: demonios que según el libro intertestamentario de Enoc -1En 7- se acostaron con mujeres]…
13 Juzgad vosotros mismos: Es propio que la mujer ore a Dios sin cubrirse la cabeza? »