Oración por los estudios


 
 

Oración por el éxito escolar, oración por los estudios, oración por el estudio


Oración del estudiante
Señor, Tú sin el cual nadie puede hacer nada,
quiero dedicarte todo mi trabajo y mi año escolar.
Ayúdame a rechazar la pereza; enséñame ardor y perseverancia en el esfuerzo;
déjame probar la alegría de un trabajo bien hecho para Tu gloria.
Dame amistades saludables para que me acompañen, y siempre la relación correcta con mi familia y mis maestros.
Sobre todo, permíteme dar la bienvenida a tu Espíritu de sabiduría y comprensión; que tu luz me guíe en todo.
En el fracaso y la tristeza, sé mi consuelo y mi refugio;
en el éxito, que guarde humildad y no olvide darte las gracias.
Conoces mis tentaciones, en mi corazón y mi cuerpo, mis preocupaciones y mi sufrimiento:
ayúdame a cargar mi cruz y seguirte, anímame!
Dame tu paz y alegría en todas las circunstancias, como lo prometiste a tus hijos.

Santo Tomás de Aquino (1225-1274) Oración del estudiante :
Creador inefable, fuente de luz y sabiduría,
dignate a extenderse en mi mente un rayo de tu luz,
expulsa de mi los oscuros desórdenes del pecado y de la ignorancia.
Dame la penetración para comprender, la capacidad de recordar, el método y la facilidad para aprender, la facilidad para hablar.
Dirige el comienzo, lidera el progreso, corona el final,
Tú que, verdadero Dios y verdadero hombre, vive y reina por los siglos de los siglos. Amén.

Santo Tomás de Aquino Oración diaria:
Dame, Señor y Dios mío, que no decaiga, ni en la prosperidad ni en la adversidad;
que no me ensoberbezca en alguna cosa, ni me deprima en otra;
de nada goce o me duela sino en lo que me lleve a ti o me separe de ti.
A nadie desee agradar, ni a nadie tema disgustar, sino a ti.
Sea para mí despreciable todo lo pasajero, y sea para mí querido todo lo tuyo.
Que me hastíe el gozo de lo que sea sin ti, que no desee nada que esté fuera de ti.
Que me deleite el trabajo hecho por ti, que me sea penoso todo descanso que sea sin ti.
Concédeme, Señor, dirigir constantemente el corazón hacia ti,
y que en mis fallos sepa dolerme con el propósito de la enmienda.
Hazme, Señor y Dios mío, obediente sin contradecir,
pobre sin ser miserable, casto sin depravación, paciente sin murmuración,
humilde sin ficción, alegre sin disolución, triste sin abatimiento,
maduro sin pesadez, ágil sin ligereza, temeroso sin desesperación.
Que sea sincero sin hipocresía, que haga el bien sin ser presuntuoso,
que corrija al prójimo sin arrogancia, que lo edifique con la palabra y el ejemplo.
Concédeme, Señor, un corazón: vigilante, que ninguna curiosidad lo aparte de ti,
noble, que ninguna influencia indigna lo envilezca,
recto, que ninguna intención siniestra lo desvíe,
firme, que ninguna tribulación lo debilite,
libre, que ningún afecto violento lo reclame.
Concédeme, Señor Dios mío, inteligencia que te conozca, diligencia que te busque,
sabiduría que te encuentre, conducta que te agrade, perseverancia que te espere confiada
y confianza de que un día al final te abrazaré.
Concédeme soportar ya aquí tus castigos como penitencia,
servirme de tus beneficios por tu gracia, y gozar de tu gozo en la patria para tu gloria.
Tu que vives y reinas y eres Dios por los siglos de los siglos. Amén.

Santo Tomás de Aquino Oración antes del estudio :
Creador inefable,
que en los tesoros de tu sabiduría
has establecido tres jerarquías de Ángeles,
y las has colocado sobre el cielo empíreo
con orden admirable
y has dispuesto admirablemente
todas las partes del universo.
Tú, pues, que eres considerado verdadera
fuente de la luz,
y principio eminentísimo de la sabiduría,
dígnate infundir un rayo de tu claridad
en las tinieblas de mi inteligencia,
alejando de mí las dos clases de tinieblas
con las que he nacido:
la del pecado y la de la ignorancia.
Tú, que sueltas las lenguas de los niños,
prepara mi lengua
e infunde la gracia de tu bendición
en mis labios.
Concédeme la agudeza para entender,
la capacidad para asimilar,
el modo y la facilidad para aprender,
la sutileza para interpretar
y la gracia abundante para hablar.
Instruye el comienzo,
dirige el desarrollo,
completa la conclusión.
Tú, que eres verdadero Dios y hombre, y que
vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.

San Materne (erudito y obispo de Colonia, IV s)Oración por los escolares :
Oh Dios, nuestro Padre Celestial, que ama a la humanidad, y es tan compasivo y misericordioso,
ten piedad de aquellos niños que son tuyos, tus siervos por quien te rezamos humildemente,
y los recomendamos a tu protección misericordiosa.
Oh Dios, digna ser su guía y guardián en todas sus empresas;
guíalos en el camino de tu Verdad
y llévalos más cerca de Ti, para que puedan llevar una vida piadosa y justa, amandote y temiéndote;
cumpliendo tu voluntad en todas las cosas.
Bendice y fortalece a sus maestros.
Y dales gracia para que sean moderados, trabajadores, prácticos, piadosos y caritativos.
Defendelos contra los asaltos del enemigo,
y dales sabiduría y fuerza para resistir todas las tentaciones y la corrupción de esta vida presente;
dirígelos al camino de la salvación, por el amor de tu Hijo, nuestro Salvador Jesucristo,
y por la intercesión de su Santísima Madre, tus Santos benditos y sus ángeles guardianes. ¡Amén!

Santa Madre Teresa Oración para ofrecer su día :
Señor, quieres que mis manos vivan este día ayudando a los pobres y enfermos que lo necesitan?
Señor, hoy te doy mis manos.
Señor, quieres que mis pies vivan este día visitando a aquellos que necesitan un amigo?
Señor, hoy te doy mis pies.
Señor, quieres que mi voz viva este día con aquellos que necesitan palabras de amor?
Señor, hoy te doy mi voz.
Señor, quieres que mi corazón viva este día amando a cada hombre solo porque es un hombre?
Señor, hoy te doy mi corazón.

(Oración de los hermanos de San Juan ante el estudio ):
que [por intercesión de María, trono de la sabiduría]
el Espíritu Santo nos abre el corazón y la inteligencia con la sabiduría de las Escrituras
para conducirnos al Verdad completa.

Oración por la intercesión de los santos del cielo :
Oración a San Expedito (oficial romano martirizado en el año 303)
O Santo Expedito, patrón de los niños en edad escolar,
lleno de confianza en tu intercesión fiel,
vengo a pedirte de obtenerme la gracia para tener éxito en el examen que temo
Intenté incluir en mis estudios toda la aplicación de la que era capaz,
pero sé que solo Dios confiere todos los bienes a quienes ama.
Por eso, Santo Expedito, recurro a tu ayuda, para que reces por mí al Señor,
y que se haga su voluntad en todo.
Que Dios también me conceda la gracia de poder servirlo durante toda mi vida
con tanto amor como lo servías. Amén

Oración a San Nicolás
A lo largo de tu vida, has sido guiado por la fe, la esperanza, la caridad,
y has sido un modelo de justicia y dulzura.
Así has obtenido por tu humildad para entrar en el Reino del Padre eterno.
Creemos que intercedes por nosotros con Él: te agradecemos por el ejemplo que nos das.
De buena gana otorgas tu protección a todos aquellos de los que eres el santo patrón: escolares, estudiantes, viajeros, pobres, afligidos, solteros, pero también a todos aquellos que confían en ti.
Te confiamos nuestra parroquia, todos los que entran a nuestra iglesia y todos los habitantes de nuestro vecindario.
Te confiamos nuestras familias y todas nuestras intenciones.
Tú también has sido el defensor de la fe:
consíguenos la conversión del corazón, el amor de la Iglesia y de nuestros hermanos.
Abiertos a los dones del Espíritu Santo para que permanezcamos firmes en nuestro apego a Jesús.
San Nicolás, ruega por nosotros!

Oración a San José de Cupertino (1603- 1663) PARA LOS EXAMENES DIFÍCILES
O San José de Cupertino, que aman a mostrar favorable hacia los que recurrimos a ti,
vengo a implorar tu ayuda para esto examen que tengo que pasar.
A pesar de mi trabajo, mi buena voluntad, temo ser molestado e incapaz de responder correctamente.
Recuerda que te has encontrado en la misma dificultad y que por la obediencia y la poderosa protección de tu padre espiritual has surgido providencialmente.
Haz lo mismo conmigo: dame seguridad en mis respuestas y dale a mi inteligencia velocidad y vivacidad.
Te pido el amor de Jesús, María y San Francisco, de los cuales eras el niño y el fiel siervo.
Con tu ayuda, Santo patrón de los exámenes,
confío en Dios y estoy convencido de que mi esperanza no se verá decepcionada. Amén.

Oración a Santo Domingo Savio (1842-1857)
Santo Domingo, a los 15 años el sueño que me atrae: ser hombre y ser santo!
La vida y el mundo se abren ante mí: sé mi fiel compañero.
Enséñame que la gran aventura para correr es ante todo la de mi alma para que cada día sea más clara;
y que el heroísmo más verdadero es preferir contra el pecar, la muerte.
Hazme consciente del sufrimiento de los demás, a la angustia del mundo que esta esperando por mis brazos.
Dame tu impulso para contribuir, en el reinado de Cristo, a una ciudad finalmente más caritativa.
Y que a las fuentes vivientes de la Escritura, de la oración y de los sacramentos,
mi adoración por Dios solo y mi devoción a María, su madre y mi madre,
estén creciendo y quemen toda mi vida. Amén

Bendición de las mochilas
Oración pronunciada por el cura:
« Dios, que santifica todo por tu Palabra, derrama tu bendición sobre † estas mochilas
y concede que todos aquellos que las usaran con amor y valor, de acuerdo a tu voluntad,
recibirá la inteligencia y la fuerza para trabajar por tu gloria. Por Cristo nuestro Señor, Amén. »
Oración pronunciada por los niños:
« Señor, ayúdanos a orar diariamente y esforzarnos durante este año escolar
para dar lo mejor de nosotros mismos, para tu mayor gloria ».
Oración por el sacerdote:
« Dios nuestro Padre, escucha la oración de estos niños que hoy te presentan su mochila escolar como símbolo de su trabajo.
Dales esperanza y amor para crecer en la fe a lo largo de este año
y prepáralos para la misión que deseas encomendarles para su felicidad y tu gloria. Por JCNS. Amén. »

Enséñame, Señor , a hacer un buen uso del tiempo que me das para trabajar y para usarlo bien, sin perder nada.
Enséñame a aprovechar los errores del pasado sin caer en el escrúpulo.
Enséñame a prever el plan sin atormentarme, a imaginar el trabajo sin sentir pena, si surge de otra manera.
Enséñame a unir la serenidad y el fervor, el celo y la paz.
Ayúdame a empezar la obra donde soy más débil.
Ayúdame en el corazón del trabajo para mantener el hilo de la atención
y, sobre todo, llena los vacíos de mi trabajo.
Señor, en todo el trabajo de mis manos, deja una gracia de ti para hablar con los demás y una falta de mí para hablar conmigo mismo.
Guárdeme del ideal de la perfección humana, de lo contrario me perderé con orgullo.
Purifica mis ojos: cuando me duele, no estoy seguro de que sea malo,
y cuando lo hago bien, no estoy seguro de que esté bien.
Señor, nunca me dejes olvidar que saber todo es vano, excepto donde hay trabajo, y que todo el trabajo está vacío, excepto donde hay amor, y todo el amor es hueco que no proviene de tu gracia.
Señor, enséñame a orar con mis manos, mis brazos y todas mis fuerzas.
Recuérdeme que el trabajo de mis manos Te pertenece y que me corresponde devolvértelas ofreciéndotelas.
Que si lo hago por el bien de la ganancia, como una fruta olvidada, me pudriré en el otoño.
Que si lo hago para agradar a los demás, como la flor de la hierba, me desvanezco por la noche.
Pero si lo hago por tu gracia, me quedaré en el bien.
Y el momento de hacer bien y por tu gloria, ES AHORA MISMO. amén